Tú me haces mejor



Es como si encendieras una chispa divina. Un halo que todos tenemos y que intentamos mantener encendido desde que nacemos hasta que llega ese día. Un único día que todos tenemos destinado y que ninguno sabe. Eso tenemos todos en común. Como un gran secreto. Como un regalo porque al final de cuentas eso es ella.





Tú me haces mejor y yo dejo que me hagas mejor y te busco e intento dejarme moldear para lograr lo que vine a hacer. He estado muchos días tratando. Lo intento. Busco. Indago. Revuelco. Revuelo. Y te buco nuevamente y estas en todo y en todos. Y estas en la sonrisa amplia de mis amigos. y estas en mi hijo y estas en mi familia y estas en todos los que veo y en los que no. Y estas en mi Merlin que parece que se está desvaneciendo hacia ti y yo no puedo hacer nada por mi amigo peludo y de cuatro patas que posiblemente ya este a tu lado y al de Crespa. Solo ustedes lo saben.





Tú me haces mejor y yo seguramente te hago mejor a ti también. Porque somos una gran sumatoria. De seres que multiplicamos nuestra energía y yo siempre he querido vernos desde el cielo. Desde bien arriba. Para saber que podemos ser inclusive más luminosos que esas imágenes que nos muestran de nuestras ciudades. Debemos vernos como lo más luminoso imaginado pero no podemos vernos aún. Tal vez no estemos preparados. Pero llegará el día y entonces comprenderemos tantas cosas que hasta ahora como que no nos son permitidas. Siguen ocultan. Hay veces creo que es como una clase de protección. Porque al parecer allí donde el ser humano encuentra una realidad aparece el deseo de otros de acapararla y de mantenerla presa y de robarla y de no dejar que fluya para todos. Como el dinero. Qué monstruo hemos creado…





Tú me haces mejor y yo deseo ser mejor y deseo que quienes me rodean siempre sean mejores. Porque somos juntos esa chispa divina hermosa y luminosa que nos mantiene como especie siendo lo que somos y que por lo tanto nos hará especiales sabiéndolo.





Tú me haces mejor…cada día. Más compasiva aunque haya tenido que dejar de buscar a mi peludo para que él también decida su día. Aunque también haya tenido que dejar a la zarigüeyita partir sin poder casi trepar por entre los árboles. No somos el todo. Somos parte y con esa parte ya somos los suficientemente grande como para lograr grandes cosas que nos harán muy grandes. Muy especiales. Eso somos. Seres especiales que divagamos por ahí entre nuestras vidas tratando de llegar a algún lado que muchas veces ni sabemos a dónde es.





Tú me haces mejor. De eso estoy segura. Me susurras y yo te escucho. Me susurras y yo te creo y te veo. Y te siento y me abrazas cada noche.





Tú me haces mejor… nos haces mejor. Sin duda.

Like this story?
Join World Pulse now to read more inspiring stories and connect with women speaking out across the globe!
Leave a supportive comment to encourage this author
Tell your own story
Explore more stories on topics you care about